Deuda de mi obligación era siempre, por lograr el honor de ser individuo de un cuerpo de quien es V. A. dignísimo Xefe, poner á S. R. P. cualquiera producción de mi limitado ingenio; pero tratando ésta obra de un arte en que con no poca admiración de los inteligentes ha adquirido el sublime talento de V. A., y su extraordinaria aplicación tanta inteligencia y adelantamiento; es absolutamente preciso que busque éste libro su patrocinio en la benignidad de V. A